Este cuento de la editorial Kókinos y escrito por Eric Battut, cuenta, como después de una mala experiencia, el gato que nunca sonreía aprende a valorar lo bueno de la vida, y con ello, a sonreír.
A nosotros, el cuento nos ha encantado y no sólo hemos dibujado la historia, sino que también la vamos a dramatizar, activando nuestra creatividad y también nuestra memoria.